EL GÉNESIS LOS MILAGROS Y LAS PROFECÍAS SEGÚN EL ESPIRITISMO

Allan Kardec

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12. La mayoría de las veces, los acontecimientos comunes de la vida privada son consecuencia de la manera de proceder de cada persona. Algunas, de acuerdo con su capacidad, su habilidad, su perseverancia, su prudencia y su energía, tendrán éxito en aquello en lo que otras fracasarán por efecto de su ineptitud. Podemos decir, pues, que cada uno es el artífice de su propio futuro, un futuro que jamás está sujeto a una ciega fatalidad, independientemente de su persona. Si se conoce el carácter de un individuo, se puede con facilidad predecir la suerte que lo espera en el camino que ha elegido.